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Más jóvenes que los hombres, con puestos de menor responsabilidad y más expuestas a sufrir desajustes familiares a causa de su trabajo: éstos son algunos de los rasgos que, según la Universidad de Alicante, describen la situación laboral de la mujer en el subsector del alojamiento en la Costa Blanca.

AUTOR: UA

Según un estudio publicado por la revista del Instituto de Investigaciones Turísticas de la Universidad de Alicante y del que es autora María Carmen Sigüenza, interesaría que el convenio del sector en la provincia de Alicante se modificara con medidas de igualdad tanto en los niveles laborales como en los salarios, teniendo en cuenta condiciones de compatibilidad laboral para que “se mejoren los contratos de estas trabajadoras, en base a sus responsabilidades familiares y, por tanto, sociales. Ello podría generar beneficios para todas las partes implicadas”.

 

Sus conclusiones se han basado en entrevistas personales en hoteles de tres a cinco estrellas en los municipios de de Santa Pola, Alicante, Benidorm, Altea y Denia. Según los datos obtenidos el porcentaje de mujeres que se encuentran dentro del área de dirección es el 3%; el de recepción, el 70%, y en el de pisos, el 99%.

 

La autora concluye que las mujeres vinculadas al mercado laboral del alojamiento en la Costa Blanca son más jóvenes que los hombres y, a partir de los treinta años, hay un fuerte descenso de su participación en el mercado laboral, con predominio de la trabajadora sin cargas familiares y con nivel medio de estudios, seguido por el nivel superior.

 

Los puestos de responsabilidad, al requerir más disponibilidad horaria, siguen siendo ocupados mayoritariamente por hombres, puesto que las mujeres entrevistadas en los diferentes establecimientos hoteleros asumen las responsabilidades familiares.

 

En cuanto al liderazgo, en los establecimientos se valora mucho el trabajo de los directores, por su dedicación y responsabilidad, y las diferencias que se apuntan están basadas en la personalidad y no condicionadas por los distintos sexos.

 

Se destacan asimismo las dificultades en las mujeres a la hora de conciliar la vida laboral y la familiar que, además, llegan a producir desajustes familiares importantes, que en algunos casos terminan en la ruptura de la familia.