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Fundado en 2000, el Instituto de Ciencia Molecular de la Universitat de València es un centro de excelencia en química y nanociencia molecular. Sus objetivos científicos se centran en el diseño y la síntesis de moléculas funcionales, las asociaciones supramoleculares y los materiales moleculares con propiedades físicas o químicas de interés.

AUTOR: UV

Las áreas de aplicación van desde el magnetismo molecular y la electrónica molecular a la nanotecnología y la biomedicina.

 

El Ministerio de Economía y Competitividad (MINECO) ha hecho pública la concesión de la acreditación ‘María de Maeztu’ al Instituto de Ciencia Molecular de la Universitat de València (ICMol), un reconocimiento a la excelencia científica e innovadora de este centro que realiza investigación de frontera y que se encuentra entre los más potentes del mundo en su área. La acreditación tiene una validez de cuatro años y contempla la ayuda de dos millones de euros para este periodo. 

 

La Secretaría de Estado de I+D+i ha concedido siete nuevas acreditaciones correspondientes al programa de Centros y Unidades de Excelencia ‘Severo Ochoa’ y ‘María de Maeztu’. Por segundo año consecutivo, la Universitat de València obtiene una concesión. Si el año pasado el Instituto de Física Corpuscular IFIC –centro mixto Universitat de València/CSIC– obtuvo el ‘Severo Ochoa’, este año el reconocimiento es para el Instituto de Ciencia Molecular (ICMol) en la modalidad ‘María de Maeztu’, destinada a organismos de menor estructura e idéntico nivel de excelencia. Ambos centros se encuentran ubicados en el Parc Científic de la institución académica.

 

Estas distinciones son el mayor reconocimiento de la investigación científica dirigida a centros y unidades de excelencia en España, y se otorgan después de un proceso riguroso de evaluación realizado por comités científicos internacionales agrupados en tres áreas: ciencias de la vida y medicina; ciencias experimentales, matemáticas e ingeniería; y ciencias humanas y sociales. Los centros y unidades acreditados destacan tanto por el impacto internacional de las contribuciones científicas que realizan, como por su capacidad innovadora y su intensa relación con el entorno social y económico. Son, además, instituciones de referencia mundial capaces de atraer talento internacional.

 

Con la resolución de esta convocatoria, son ya 10 las unidades ‘María de Maeztu’ y 23 los centros ‘Severo Ochoa’ que conforman la base española de investigación excelente altamente competitiva, y cuatro de estos se encuentran en la Comunitat Valenciana. Cuentan con la acreditación ‘Severo Ochoa’ el Instituto de Neurociencias de Alicante (UMH/CSIC), el Instituto de Tecnología Química ITQ (UPV/CSIC) y el IFIC (UV-CSIC). El ICMol se lleva ahora la primera acreditación ‘María de Maeztu’ en la Comunitat Valenciana.

 

Los tres centros que han conseguido este año la distinción ‘Severo Ochoa’ son el Basque Center on Cognition, Brain and Language, el Instituto de Ciencia de Materiales de Barcelona del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), y el Centro de Investigación Agrigenómica (CRAG), consorcio formado por el CSIC, el Instituto de Investigación y Tecnología Agroalimentarias (IRTA), la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB) y la Universitat de Barcelona (UB). Estos tres centros recibirán un millón de euros anual durante cuatro años.

 

Las cuatro unidades de investigación seleccionadas en la modalidad ‘María de Maeztu’ son: el departamento de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones de la Universitat Pompeu Fabra, el departamento de Física de Partículas del Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (CIEMAT), el Instituto de Ciencia Molecular de la Universitat de València, y el Instituto de Ciencia y Tecnología Ambientales (ICTA) de la UAB. Estas unidades contarán con una financiación de 500.000 euros anuales durante cuatro años.

 

Más de 160 personas, distribuidas en ocho equipos científicos, se dedican a la investigación en este centro dirigido por el catedrático de Química Inorgánica Eugenio Coronado.

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